jueves, 2 de octubre de 2008

El estado de las cosas

En mi próxima vida, quiero reencarnarme en gato.

Esto de vivir en una sociedad altamente tecnificada -y eso que vivimos en el culo de Europa- tiene sus pros y sus contras.

LO BUENO es poder estar enterado -casi siempre- a tiempo real de lo que pasa en el mundo. RSS feeds, Menéame, periódicos de todas las tendencias y colores, todas las imágenes y los vídeos del mundo. Eso es lo mejor de este percal tecnológico: siempre habrá alguien con las mismas inquietudes -o parecidas- que tú, con un vídeo recién ripeado y subidito a su cuenta de Youtube. Ayer volví a pegarme unas buenas risas viendo este fragmento del programa "Viaje con nosotros", del genial Javier Gurruchaga:



LO MALO es esa, a veces divertida, a veces resignada, a veces molesta sensación de que NADIE se salva del control. Para muestra, un botón:


Robin Hood tiene teléfono móvil con cámara y hace justicia a su modo. Silvio, ¿hemos desayunado bien?

Guerra
iTunes: "Vida d'un gat", Albert Pla.